Bueno, pues hasta aquí ha llegado la cosa. Hasta hace unas semanas
pensaba que esto duraría mucho y que si algún día se acababa sería porque se me
habrían secado las ideas o porque la gente dejaría de interesarse por las
historias de Frank, Nemesio y compañía. Pero, mira tú, al final he preferido cargármela yo, dadas las circunstancias estas tan raras de últimamente.
La serie ha durado tres años, aunque empezó mucho antes. Lo
primero que publiqué en el Jueves fue una tira de Zombie Life, en una sección
que se utilizaba para probar autores nuevos. Y ahí, fueron apareciendo los zombis,
de forma irregular, hasta que la sección desapareció. Aquella desaparición me
pilló con once tiras dibujadas, así que decidimos convertirlas en una guinda. Y,
al parecer, aquellas once tiras funcionaron tan bien en las encuestas que
decidieron darme la oportunidad de hacer una sección fija.
Es por esto que siempre he pensado que Zombie Life había ido
creciendo poco a poco gracias al cariño de los lectores. No fue una apuesta
arriesgada, no hizo falta jugársela conmigo, ya contaba con el apoyo de la
gente. Y es quizá eso ha hecho aún más dura esta decisión de dejarlo.
Pero venga, va. Ahora datos, que os gustan los datos: Han
sido tres años, 157 páginas o lo que es lo mismo, 628 tiras (655 si se cuentan
las que aparecieron antes de ser una serie fija)
Tiras por las que han desfilado un
montón de famosos, la mayoría muertos, que van desde Steve Jobs a Harold Ramis
pasando por casi todos los que palmaron entre medio.
Se ha derramado sangre como para llenar seis piscinas olímpicas.
Si pusiéramos en fila las
vísceras que se han arrancado en esta serie, llegarían hasta luna (este dato no se basa en nada, pero es que siempre es hasta la luna).
Ah, y una de las mejores cosas, al menos para mí, es que en el
transcurso de estos años, he aprendido a dibujar. Y para demostrarlo aquí
tenéis la tira número 1, de 2009...
...y la página 157, de 2014.
Bueno, y qué más os voy a decir. Que muchas gracias a todos los
que habéis seguido la serie durante todo este tiempo. Y también a todos los que estos
días me habéis dicho que la echaréis de menos.
Yo también echaré de menos eso de ponerme los lunes a
pensar qué harán esta semana Frank y Nemesio, la verdad. Pero, ¡eh! ¡Puede que
haya noticias suyas pronto! Y no digo más